viernes, 4 de enero de 2008

De vuelta en casa

Después de una semana fuera de la ciudad me ponía al corriente en el correo cuando algo llamó mi atención en la ventana. La cola de un pájaro se sacudía entre las ramas del encino. Tomé mi taza de café y me quedé viendo a través del cristal. Qué importancia tiene el movimiento de un pájaro…el hecho es que estoy en casa, es día cuatro de enero de 2008 y junto a mí están mi familia y mis libros.

2 comentarios:

Dulce M González dijo...

Esta entrada me encantó. Un "momento fecundo" (así les llamaba Nietzsche) traducido a palabras. Saludos, Gaby

Eduardo dijo...

esas pequeñas cosas que son la vida....hayyy...como me gustan a mí.