viernes, 26 de octubre de 2007

LA COMPOSICIÓN

Bien se ha dicho que leer es como un viaje. El lector se deja (espero que así sea) llevar por los caminos que se le presentan a través de las páginas del libro. Con la lectura se completa el ciclo que fue iniciado en el momento en que el autor concibió aquella primera idea en su cabeza, el ejercicio de la intellectio, y todo para nuestro gozo, para el de él, para el tuyo, para el mío. Sin embargo, cuando de oficio se es escritor o crítico, junto a esa lectura gozosa, ocurre una segunda que tiene que ver con el análisis del estilo, la estructura, los argumentos, la verosimilitud, las conclusiones etc. Analizar desde afuera, nos dice Derrida, lejos del centro, de los referentes oficiales, alejarnos de la contaminación: una difícil tarea. Y sin embargo no descuidar la tradición, las lecturas que nos refieren a otros textos. De acuerdo a Bloom, todo poema lleva otros poemas dentro, es producto de una mala interpretación de otro poema. De cualquier manera esa lectura adyacente se lleva a cabo. Las interpretaciones surgen creando así un nuevo ciclo que abarca parte del primero, entonces son dos círculos que cruzan y comparten pero que tiene su parte privada. En el segundo círculo me encuentro, ahora que trato de entender, El cuerpo de los símbolos, de Antonio Gamoneda (Calamus 2007). El libro es de género híbrido. En momentos hay una sustancia narrativa, en algunos otros una materia poética y versicular, en otros una clara inclinación ensayística. El autor nos ofrece un horizonte de su poética. Nos dice de sus lecturas, sus hallazgos, su poesía, su vida. La parte que quiero recuperar ahora es la que tiene que ver con la composición de la obra (prometo hacer malas interpretaciones). Es importante decir que el autor define que: el poema es un objeto de arte cuya materia es el lenguaje y es generado por las fuerzas de la composición, la sensibilidad y la memoria. Como tal, está fuera del mercado pues carece de una función real y amplia. Y reconoce que sólo el emisor y unos pocos receptores se verán beneficiados de la intensa experiencia que trae consigo. En el centro de la fuerza creadora, Gamoneda, traza en el espacio la línea del tiempo y la memoria. Pues la temporalización, nos dice, posibilita una conducta musical del lenguaje, y la memoria, es decir, lo perdido, posibilita la existencia física del poema. A esto, le suma una sintaxis para la sensibilidad, ingrediente fundamental para poder ser poesía. Enseguida he trazado un posible esquema.



EJES DE LA COMPOSICIÓN
Poesía
Música
Sintaxis
________________________________
Tiempo -Memoria- Sensibilidad

(*de izquierda a derecha, de abajo hacia arriba)


Antonio Gamoneda advierte que la creación no sucedería, al menos en su caso, a no ser por la conciencia de ir hacia la muerte. Partiendo de esa afirmación, agregaríamos la palabra, Muerte, en la parte del extremo derecho del eje horizontal.
Retomando mi comentario inicial debo hacer dos anotaciones. El cuerpo de los símbolos, sale del centro, es decir de los referentes oficiales, entre otras cosas porque va más allá de los géneros establecidos; al mismo tiempo lleva una marca tradicional pues no sólo se sugieren otros textos sino que se mencionan claramente con nombre y apellido. Y sí, es un viaje delicioso.

6 comentarios:

Ofelia Pérez-Sepúlveda dijo...

En verdad me inquieta la seriedad con que nos compartes tu lectura de Gamoneda. A mí me gustaría saber, más allá de la reflexiva lectura, si para ti, también la creación sucede desde la conciencia de ir hacia la muerte.

Gracias por leer en esta ciudad.

Pedro M. Martínez dijo...

Símbolos.

gabriela cantú westendarp dijo...

querida ofelia: la respuesta a tu pregunta requiere tiempo. espero poder hacer un comentario en este blog la semana que entra sobre eso. lo que puedo decir ahora es que: aveces creo que me tomo la vida muy en serio y luego me pregunto ¿hay alguna otra forma de tomarla?
un abrazo y gracias por abir una grieta,
gaby.

gabriela cantú westendarp dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

sobre "símbolos" de pedro: ¿a qué se refiere? al comentario sobre Derrida, a la dicotomía sinificado-singnificante de Saussure, a la red interminable de sígnos, de símbolos que es el lenguaje, a qué Gamoneda no dice muerte cuando dice muerte, a qué todo es una metáfora...

Pedro M. Martínez dijo...

Perdón, me refiero a que símbolo se escribe con M antes de la B.
Y no quería molestar.
Lo siento.